Indicó que, además, para llevar a cabo un referéndum sobre si se está a favor o en contra de la independencia de Euskadi, habría que matizar primero a quién debe dirigirse tal pregunta y si la necesidad de formularla está respaldada por la mayoría de la población.

En su opinión, actualmente "no se sab ni lo que hay que preguntar, porque cuando se habla de autonomía e independencia nadie conoce el significado de estos conceptos aplicados al País Vasco, ni a quién habría que plantearle la pregunta para que votasen, ya que no está claro si Navarra y el País Vasco francés deben entrar en este referéndum".

A este respecto, calificó de "delirantes" las formulaciones realizadas por el Partido Nacionalista Vasco con motivo del manifiesto que difundieron en el centenario de fundación, al "juntar lo mismo e País Vasco francés, Navarra y el País Vasco español".

LA GUERRA SUCIA

En cuanto a la trama de los GAL, Savater mostró su total disconformidad con este tipo de procedimientos, argumentando que "toda guerra sucia, aunque pretenda defender al Estado, es en el fondo una guerra sucia contra el propio Estado de derecho", y advirtió que "no hay nada tan contraproducente" como esos métodos.

Savater señaló que el problema del País Vasco se origina sobre todo en lo que calificó de "mitología nacionalist" que tiende a mostrar como un enemigo a los que vienen de fuera o no aceptan sus planteamientos. En su opinión, "la mitología nacionalista es el verdadero problema que tenemos, porque la violencia es un síntoma, pero el nacionalismo es la causa".

El autor de "El jardín de las dudas" aseguró que, como intelectual, él no se siente más amenazado físicamente que otros ciudadanos vascos, aunque aseguró que asume su condición de "bosnio en este país".