Fernández de la Vega se reunió en México con el presidente del país, Felipe Calderón, al que agradeció el respaldo prestado por las autoridades locales en la lucha de España contra ETA. Esa colaboración ha permitido la identificación y extradicción de varios miembros de la banda, los últimos en el año 2006.

A pesar de ser preguntada, la vicepresidenta no confirmó que el Gobierno tenga ya constancia de la autoría por parte de De Juana de la carta que se leyó el pasado sábado en el acto organizado por simpatizantes del etarra para recibirle tras salir de prisión.

Su respuesta fue sobre todo para enviar a los ciudadanos "un mensaje de tranquilidad" sobre la base de que está actuando "la máxima garantía que existe en un estado de derecho", el poder judicial, y los demás se limitan a colaborar en todo lo que pueda contribuir a esclarecer el objeto de la investigación, si ese acto constituyó un delito de enaltecimiento del terrorismo y, en ese supuesto, identificar a los responsables.

"Quien marca la pauta es el juez, que es quien tiene que decir si hay autoría o no la hay" por parte del etarra, en función de los datos que le hayan llegar las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado una vez concluida su investigación.

Los ciudadanos, reiteró, deben de estar tranquilos porque está actuando quien tiene que hacerlo, el poder judicial, "que funciona bien y que desde el primer momento ha emprendido actuaciones". El Gobierno, en todo caso, mantiene su compromiso de no permitir "que se menosprecie a las víctimas".

La vicepresidenta recordó también que el Gobierno trabaja con el PP y con los demás partidos representados en el Congreso de los Diputados para "explorar una reforma legal" del Código Penal y de la Ley de atención a las víctimas del terrorismo para incrementar su protección, pero no precisó el calendario que se baraja.