Estas fuentes explicaron que Fernández Ordóñez se encuentra esta tarde en su domicilio y está siendo atendido por su equipo médico.

El declive de la carrera política del ex jefe de la diplomacia española comenz en el verano de 1988, cuando tuvo que ser operado de próstata en la Clínica Puerta de Hierro, en Madrid. Un año después, tuvo que volver a pasar por el quirófano para que le fueran extirpados unos pólipos intestinales.

Fue en ese momento cuando Fernández Ordóñez se planteó seriamente la posibilidad de abandonar la política y, sobre todo, un ritmo de vida que le había obligado a recorrerse en avión, hasta entonces, un total de 250.000 kilómetros por todo el mundo.

De nuevo, en noviembre de 1991, ernández Ordóñez tiene que cancelar su agenda de trabajo por un problema de piedras en la vesícula, que aunque no le obligó a pasar por el quirófano, sí le mantuvo en reposo durante dos meses.

Su reaparición pública se produjo el 18 de diciembre de 1991 en Bruselas, en una reunión del Consejo Atlántico de la OTAN.

Sin embargo, el veterano político español no pudo cumplir su deseo de ser ministro de Asuntos Exteriores en la II Cumbre Iberoamericana celebrada recientemente en Madrid, a cuya conclusón tenía previsto retirarse.

A la vuelta de un viaje preparatorio de la "cumbre" por diversos países de América Latina, Fernández Ordóñez ya llegó muy débil y hubo de suspender sus actividades. El 18 de junio pasado, el presidente del Gobierno, Felipe González, decidió que Javier Solana le relevara en el cargo.