La patronal propone en concreto la puesta en marcha de una batería de medidas que permitan atender al 30% de los alumnos, que "no alcanza los mínimos previstos para la enseñanza obligatoria".

FERE-CECA considera imprescindible "propiciar una profunda reflexión sobre el reto educativo que supone dar una respuesta pedagógica sólida y bien fundamentada a estos chicos y chicas con graves dificultades de aprendizaje que desean abandonar el sistema educativo y dirigirse hacia el mundo laboral, aún sin haber obtenido ninguna cualificación".

El objetivo es que los alumnos alcancen los objetivos mínimos de la ESO, la adquisición y certificación de competencias, el crecimiento del sentido profesional y la inserción laboral con unos niveles básicos de profesionalización.

Para FERE-CECA, la orientación y la tutoría son piezas clave de este tipo de programas, teniendo en cuenta las características específicas de sus destinatarios.