A pesar de ello, De Castro reconoció, en declaraciones a Servimedia, que no han conseguido su "meta principal", es decir, un pacto educativo "en el que se incluya a todos, también al PP". En su opinión, esta sería la única forma de lograr una ley educativa estable, alejada del debate político y partidista.

Agregó que aún quedan cuestiones que deberían mejorarse, como el tratamiento de la asignatura de Religión y la autonomía de los centros, tanto concertados como no concertados, ya que el sistema "todavía está muy controlado por la Administración".

"GRANDES LOGROS"

Manuel de Castro explicó cuáles son para la FERE-CECA los "grandes logros" conseguidos en la negociación con el grupo Parlamentario Socialista, de la que se desmarcaron la mayoría de las organizaciones que convocaron la manifestación contra la LOE del pasado 12 de noviembre, como Concapa, CECE, USO o el Foro de la Familia.

Por lo que se refiere al reconocimiento del esfuerzo personal del alumno, De Castro valoró el hecho de que la posibilidad de pasar de curso con tres asignaturas quede limitada, tras la votación de las enmiendas, "sólo para casos excepcionales".

Además, se ha fijado definitivamente en un 55-65% el porcentaje de horas comunes que han de compartir todos los alumnos, cuando en un principio dicho margen suponía el máximo de contenidos comunes para todo el Estado.

Otro punto importante para FERE-CECA es la mejora en la libertad de elección de centro, ya que con las modificaciones introducidas "ningún criterio de admisión tiene carácter prioritario y excluyente". Así, el criterio de cercanía al centro no será privilegiado, y el de "zonificación" será sustituido por el de "áreas de influencia", permitiendo mayor movilidad a los alumnos.

Por otro lado, indicó que la ley "ha concretado finalmente las competencias de las comisiones de garantía", que sólo funcionarán cuando haya exceso de alumnos y para verificar que se han cumplido los requisitos de admisión.

CARACTER DEL CENTRO

Además, las instancias sobre la elección de centro "irán a los colegios y no a la Administración", y la reserva de plazas, establecida sobre todo para los alumnos inmigrantes, no tendrá caducidad, ya que algunos de ellos llegan cuando el curso ya ha comenzado.

En cuanto a la programación de la red de centros, la ley reconoce el derecho de los colegios concertados para crear centros educativos, independientemente de la Administración. Además, se reconoce que el carácter propio de los centros "debe ser respetado" y que deberá ser dado a conocer por el propio centro.

Igualmente, la ley otorga a los centros libertad para ampliar horarios e incluir asignaturas optativas, dentro de un marco de referencia fijado por el Estado. Otro "avance", a juicio de Manuel de Castro, es que todo centro que cumpla los requisitos fijados tendrá derecho al concierto, "no a pedirlo, como se contemplaba en un principio".

En lo relativo a la financiación, consideró que la subida de un 1,15% del presupuesto para gastos generales es "deficiente", en comparación con "el 17% perdido en los últimos años", si bien se ve compensada por la "no prohibición de donaciones" por parte de los padres.