Echevarría se incorporó al Zaragozano en abril de 1992 procedente del grupo del BBV y desempeñaba hasta ahora las funciones de consejero director general.

El Banco Zaragozano obtuvo en 1993 un beneficio neto tras impuests de 4.243 millones de pesetas, tan sólo ligeramente superior, en un 1 por ciento, al beneficio del ejercicio anterior.

Sin embargo, esta entidad bancaria destinará a dividendos 2.373 millones de pesetas, lo que representa un incremento del 9,1 por ciento sobre el ejercicio 1992 y un 'pay-out' (porcentaje del beneficio destinado a dividendo del 55,9 por cien).

José Ramón Alvarez Rendueles, presidente del Banco Zaragozano, señaló en su intervención en la Junta General de Accionistas que "hay razons para creer que en nuestro país la recesión alcanzó su punto crítico a mediados de 1993 y que la economía ha iniciado una tendencia hacia la recuperación".

MENOR MOROSIDAD

En esta misma línea, el nuevo consejero delegado indicó que en la entidad bancaria zaragozana viene registrando una evolución "marcadamente decreciente y contínua" en el saldo de su morosidad y destacó que durante los últimos siete meses este saldo se ha venido reduciendo sistemáticamente después de alcanzar su cota más elevada e pasado mes de agosto.

El Banco Zaragozano dispone de un nivel de recursos propios de 42.378 millones de pesetas, que suponen un excedente de 8.028 millones respecto a los requerimientos de las disposiciones legales.

El balance del grupo al término del ejercicio 1993 representaba 631.190 millones de pesetas, con un 11,2 por ciento de aumento respecto al ejercicio 1992. Los recursos de clientes alcanzan los 411.321 millones de pesetas, un 12,3 por cien por encima de los del año precedente y la invrsión crediticia se situó en 297.032 millones de pesetas, ligeramente superior a la del año anterior.

Echevarría, en su intervención ante la Junta como nuevo consejero delegado, señaló que el objetivo del Banco Zaragozano es lograr un beneficio similar al del año 1993, lo que representaría un incremento del beneficio por acción tras la reducción de capital de 225 millones de pesetas que la Junta de Accionistas ha aprobado.

El segundo objetivo del banco será finalizar el proceso de ajuste, en conceto reducir al 6 por ciento la capitalización para el cálculo de las dotaciones a pensiones e incrementar la cobertura de la morosidad, que actualmente se encuentra en un 68 por ciento hasta el 80 por ciento.