La Junta Directiva Nacional, el máximo órgano entre congresos del PP, se citará este lunes finalmente, tras haber sido aplazado el encuentro previsto para una semana antes con el fin de facilitar que los presidentes regionales pudieran seguir en sus territorios el impacto de la DANA y evitar desplazamientos de riesgo por las fuertes lluvias.

Con el telón de fondo de la investidura fijada para los días 26 y 27 de septiembre, Feijóo se dirigirá a los barones del PP y al resto de cuadros del partido. Lo hace tras sus reuniones en los últimos días con el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez; con el líder de Vox, Santiago Abascal, y con el presidente de Canarias y Coalición Canaria, Fernando Clavijo.

Tras exhibir sintonía con Abascal y Clavijo, y a falta de escenificarla también con el líder de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Javier Esparza, Feijóo se encontraría a cuatro escaños de los 176 que le colocarían en el Palacio de la Moncloa, ya que el PNV ha expresado en varias ocasiones que no le prestará su apoyo. Pese a lo “complicado” del objetivo, en el PP piensan que el ganador de los comicios debe reivindicar su victoria y cumplir con el mandato del Rey.

Por ello, Feijóo tiene la posibilidad de aprovechar “una oportunidad política" en su investidura a pesar de que ésta previsiblemente sea fallida, según trasladan fuentes del PP a Servimedia. Hasta la celebración del debate, en Génova piensan que se “desgasta” la figura de Sánchez por el precio cada vez mayor que le ponen sus potenciales socios para reeditar el poder.

En cambio, resaltan las fuentes consultadas, Feijóo está dejando claro que él “no quiere ser presidente a cualquier precio” porque tiene “principios” y que esa es la principal diferencia con Sánchez, a quien sin embargo el líder del PP sigue apelando para que recapacite y poder ahondar en los grandes pactos de Estado y dar carpetazo a las exigencias del expresidente catalán Carles Puigdemont.

Precisamente, en su ronda de contactos de cara a la investidura, Feijóo en principio reniega del diálogo con Junts si le va a plantear, como hiciera Puigdemont este martes desde Bruselas, la amnistía como requisito previo a una investidura. “Podemos ahorrarnos la reunión” en ese caso, sentenció el líder del PP nada más escuchar al expresidente catalán.