Así lo afirmó en una entrevista en Telecinco recogida por Servimedia, en la que volvió a rechazar la posibilidad de dar sus votos al candidato del PSC, Salvador Illa, y en la que reiteró que no entablará ninguna “conversación política“ con Junts hasta que sus dirigentes se “reconcilien” con la ley, independientemente de si Puigdemont sigue o no en política.

En el tramo final de la entrevista, Feijóo fue preguntado sobre los posibles pactos en Cataluña tras las elecciones autonómicas del pasado 12 de mayo y, en primer lugar, puso en valor que, si los independentistas “no son mayoría” es “porque el PP ha subido mucho”, ya que ERC, Junts y la CUP suman más votos que Illa.

Entonces se remitió a la cuestión y apuntó a Barcelona, donde permitieron la investidura del socialista Jaume Collboni para evitar la de Xavier Trias, de Junts, y donde después el PSC pactó con ERC su entrada en la Junta de Gobierno. “Por lo tanto, no”, reiteró para cerrar otra vez la puerta a un pacto con los socialistas, a los que ve llegando a un acuerdo con ERC.

"El PSC tiene un compromiso para intentar mantener la gobernabilidad de Sánchez aquí en Madrid. Y eso pasa por darle el gobierno, el cogobierno o la alianza de gobierno a Esquerrra Republicana, que es la que parece está dispuesta, y a ver cómo torea a Junts”, declaró. Hace una semana, en cambio, auguró que Illa investiría a Puigdemont tras las europeas.

No obstante, Feijóo sí insistió en que el PSOE buscará una fórmula para mantener el apoyo de Junts, ya que, aunque el independentismo haya sido “superado en las urnas”, sigue “teniendo la llave del Gobierno de Cataluña y del Gobierno de España”. “Porque si mañana los siete imputados de Junts o los siete de Esquerra dicen ‘esto se acabó’, se acabó definitivamente”, añadió.

POSIBLE MARCHA DE PUIGDEMONT

Preguntado entonces por una hipotética marcha de Puigdemont y un reposicionamiento de Junts más alineado con los postulados de CiU, Feijóo insistió en que los independentistas tienen que “reconciliarse” y “cumplir con la ley, la Constitución, el Estatut y el Código Penal” para poder “entablar una conversación política” con ellos.

“Reconciliarse con la ley es el criterio y el requisito mínimo para poder entablar una conversación política. Las conversaciones políticas en el ámbito del Estado de derecho y en el ámbito del cumplimiento de las leyes son posibles. Fuera son imposibles”, explicitó.

Entonces presumió de no haber cedido a sus pretensiones para ser presidente del Gobierno. “Nosotros no vamos a modificar el Código Penal al dictado de los abogados de Junts. Por eso yo le estoy hablando aquí como jefe de la oposición, porque, después de haber ganado las elecciones, lo que le propusieron al señor Sánchez nos lo propusieron a nosotros: si ustedes nos dan una ley de la amnistía y le garantizan la inmunidad judicial al señor Puigdemont y a otros de Junts no tenemos inconveniente en que el Gobierno sea del señor Feijóo. Y dijimos que no, que no lo podemos hacer. Primero porque no es legal. Segundo porque no es moral. Y tercero porque nos comprometimos en el programa electoral y en las elecciones a no hacerlo”, expuso.

Entonces contrapuso su postura con la de Sánchez, quien se comprometió también en campaña a no aprobarla pero finalmente sí accedió a las pretensiones de Junts.