“Si no hay un buen acuerdo, no habrá una buena ley; y si no hay una buena ley, el PP no la apoyará”, afirmó el portavoz nacional y responsable de Cultura del principal partido de la oposición, Borja Sémper, en la rueda de prensa posterior al Comité de Dirección.

Todo ello después de que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, aclarase en una entrevista en Onda Cero que apoyó la tramitación de esta iniciativa popular para evaluar caso por caso y no para dar “papeles” a “todos”, al tiempo que avanzó que su partido defenderá que sean “expulsados” del territorio español aquellos con “antecedentes penales”, “penas de privativas de libertad” o pertenencia a “mafias”.

En cambio, con las personas que acrediten su “interés” por trabajar y su respeto por las normas españolas, el líder de la oposición cree que deben tener “muchas más posibilidades” de quedarse en España, siempre y cuando se cumpla con el Pacto de Migración y Asilo de la Unión Europea.

El Congreso aprobó en abril la toma en consideración de la ILP, que se encuentra paralizada en la Mesa del Congreso, que ha detenido su tramitación parlamentaria con ocho ampliaciones de enmiendas. El PP ya avisó entonces de que sería necesario incorporar modificaciones al texto para poder contar con su apoyo. Y ahora Feijóo avisó de que lo primero que se debe acordar en las Cortes son los “requisitos” para regularizar a los inmigrantes ilegales que en estos momentos residen en España.

La misma línea siguió Sémper, quien señaló que el trámite parlamentario ha de ser “técnicamente riguroso” y atender “la realidad socioeconómica de cientos de miles de personas en España que necesitan una respuesta”. “Uno por uno, caso por caso, conociendo sus circunstancias”, añadió antes de compartir un buen augurio para “los que están trabajando” y “los que vienen a emprender un proyecto de vida en España”.

NEGOCIACIONES CON EL GOBIERNO

Por otro lado, preguntado por si hay avances en las conversaciones con el Gobierno para alcanzar un pacto migratorio, Sémper reconoció implícitamente que se han producido negociaciones porque tienen contactos “con todo el mundo”, pero rechazó dar detalles del contenido de su contenido.

No obstante, sí insistió en que el Gobierno debe tomar en cuenta sus “reivindicaciones” lograr cualquier acuerdo. Además, se sacudió de cualquier responsabilidad en la crisis migratoria actual y recordó que Sánchez lleva gobernando seis años.

Por último, sobre las palabras de Abascal tachando de “suicida” las políticas migratorias del PP, al que acusó de ser “la mayor estafa” de España, Sémper apuntó que existe “una confluencia de intereses” entre PSOE y Vox para situar al partido dirigido por Feijóo como “el adversario a batir”.