"Quiero hacer un ruego muy importante a todos aquellos videoclubs que cobran cantidades tan rídículas como lo son cualquiera que no supera las 300 pesetas por el alquiler de 24 horas", asegura Pérez en el último número de la revista de la FEAV.

"¡Seamos serios! Son ustedes lo que más daño hacen al resto de sus colegas y los que desprestigian y devaluan cada vz más nuestra querida profesión", añade el presidente de la Federación de Videoclubs.

Pérez Briceño recuerda que los problemas del sector no se han acabado con la reciente firma del acuerdo sobre "rental right" (acuerdo con las entidades de gestión de derechos de propiedad intelectual). Por ello, apela a la solidaridad de todos los empresarios del sector, ya que algunos, "con su descadara tacañería, dejan mucho que desear".

Entre las reivindicaciones pendientes del sector figuran la de contar conun IVA reducido, el desarrollo del vídeo digital (DVD), el problema de los precio de venta en los supermercados y las ventanas de protección -que garantizan que los videoclubs puedan explotar las películas antes que las cadenas de televisión-.