La patronal de la industia farmacéutica asegura en un comunicado que intentará paralizar esta medida, que supone a su juicio el ejercicio, por parte de la Administración andaluza, de unas competencias que no le corresponden.

Farmaindustria considera que con esta decisión, el Gobierno andaluz invade competencias del Ministerio de Sanidad, al que solicita, como ya ha hecho en situaciones similares, que tome las oportunas decisiones para impedir esta invasión de competencias por parte de una administración autonómica.

ParaFarmaindustria, esta medida también pone en peligro los recientes procesos inversores emprendidos por algunos laboratorios, cuestiona la labor de prescripción del médico, rompe la unidad de mercado y puede restringir el acceso a las innovaciones terapéuticas a los andaluces.