Según afirmó hoy en Madrid el director general de Farmaindustria, Humberto Arnés, hay "voluntad de acuerdo" por ambas partes, aunque hay que determinar claramente el concepto de gradualidad, el rango normativo con el que se introduciría y el plazo de aplicación.

Esta negciación se entablaría cara a las revisiones anuales de la normativa sobre precios de referencia, ya que la orden ministerial de 2004 "esta descontada".

Para la patronal, es básico acodar qué se considera gradualidad de la revisión, algo esencial para los laboratorios, "porque una revisión de precios, que incide sobre determinados productos y de forma drástica, puede destruir una empresa", dijo.

Arnés insistió en que la decisión de sus órganos de gobierno de recurrir esta bajada de precios se ha ralizado como se hace con cualquier normativa que sea lesiva para los intereses de cualquier laboratorio.