La oposición de esta asociación de consumidores a la comercialización de estos productos se basa, según argumenta, en razones de responsabilidad para la salud humana y del planeta.

Facua considera que falta información suficiente sobre la presencia de OMG en los alimentos, sólo prevista a partir de determinados niveles que considera excesivos, y sobre los efectos de su consumo, aún imprevisibles, al objeto de que el consumidor pueda adoptar una decisión libre y consciente.

Por ello, denuncia que los actuales criterios de información y etiquetado no garantizan que el consumidor que así lo quiera pueda excluir de su dieta los OMG.

Asimismo, FACUA considera muy peligroso el acaparamiento de la producción alimentaria mundial en manos de unas cuantas multinacionales del sector, propietarias de las patentes de las semillas, que tendrán un poderoso instrumento para decidir sobre el destino y las cuestiones más trascendentales de la economía mundial.