Según estos datos, en los últimos años el mercado español de hoteles de lujo ha experimentado un notable desarrollo, de forma que en julio de 2007 se encontraban en funcionamiento 250 hoteles de cinco estrellas, 56 más que a finales de 2004. Por su parte, el número de habitaciones se incrementó en un 25% en este período, superando las 40.000.

Andalucía y Canarias son las comunidades autónomas con un mayor número de hoteles, reuniendo conjuntamente el 35% del total.

Son, asimismo, las comunidades que presentaron un mayor crecimiento entre diciembre de 2004 y julio de 2007, al contabilizar ocho y nueve aperturas, respectivamente. Los hoteles de costa suponían en esta última fecha el 48% del total de establecimientos y el 55% de las habitaciones, participaciones que se situaban en el 40% y el 42% en el caso de los hoteles urbanos.

La tendencia a convertir edificios emblemáticos, como mansiones o palacios, en hoteles de reducida dimensión y a inaugurar pequeños establecimientos con encanto, está motivando una progresiva disminución del tamaño medio de los hoteles de cinco estrellas. En los últimos años se ha pasado de las casi 180 habitaciones de media por hotel en el año 2000 a las poco más de 160 del ejercicio pasado.

En conjunto, los hoteles de cinco estrellas facturaron 1.350 millones de euros en 2006, registrando su volumen de negocio un crecimiento medio anual del 12% en el período 2004- 2006.

En julio de 2007 las cinco primeras cadenas con presencia en el segmento de cinco estrellas (Sol Meliá, Starwood H&R, Expo H&R, Barceló H&R y Hesperia) reunían el 33% del número total de habitaciones, porcentaje que se situó en el 45% al considerar a las 10 principales.

Según el estudio de DBK, las previsiones a corto y medio plazo, tomando como referencia los proyectos actualmente en curso, apuntan al mantenimiento de la tendencia de fuerte crecimiento. A finales de 2008 el número de hoteles podría situarse en torno a los 315 establecimientos, y elevarse hasta 350 en diciembre de 2009.