En su opinión, la razón de los problemas de la inmigración "no está en la ley", sino que es un problema de tipo social, de tipo político, de tipo económico, pero que no tiene ni su raíz en la ley ni su única solución en la ley.

"Es un problema de mucha mayor envergadura, que lo que requiere es una política integral y global por parte de este Gobierno, que en estos momentos todavía creemos que brilla por su ausencia", afirmó.

Fernández de la Vega reiteró que la posición socialista s tratar de llegar a un consenso, "partiendo de la base de que no es el momento adecuado de hablar de la modificación de una ley que está empezando en estos momentos a rodar y aplicarse", aseveró.

En este sentido, propuso que se aplique la ley, que se evalúe y razonadamente se pongan de manifiesto las disfunciones que pueda tener. "Una vez hecha esa evaluación, podremos hablar de modificación de la ley", dijo Fernández de la Vega. "Pero, eso no obsta a que ahora, con los problema que tenemos, no se adpten medidas radicales y concretas para solucionar el problema de los menores, el problema de la integración y los derechos de los inmigrantes".