Lo dijo en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados, al hablar de los últimos incidentes provocados por la negativa de Marruecos a permitir la entrada en El Aaiún de concejales, periodistas y representantes de ONG.

León explicó que él mismo trasladó personalmente a las autoridades marroquíes la preocupación de España por estos incidentes y la conveniencia de permitir esas visitas, y el acceso libre de los medios de comunicación al territorio del Sáhara Occidental.

Las autoridades marroquíes reiteraron la intención expresada anteriormente por el ministro de Exteriores marroquí, Mohamed Benaisa, de invitar a parlamentarios a una visita al Sahara y a mantener los encuentros que consideren oportunos.

El Gobierno, prosiguió León, ha valorado "con satisfacción" esa invitación, que se ha traducido ya en sendas invitaciones al Congreso de los Diputados y al Senado cursadas por las Cámaras marroquíes.

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, ha expresado ya a los presidentes del Congreso y del Senado su opinión favorable a que esa visita se lleve a cabo.

Bernardino León reconoció que la actual situación es "inaceptable", porque el estancamiento del conflicto únicamente contribuye a incrementar las frustraciones de las partes y a fomentar acciones unilaterales.

Es necesario, en su opinión, incrementar los esfuerzos de las partes y de Naciones Unidas para fomentar los acercamientos bilaterales que conduzcan a una solución "consensuada, justa, definitiva y acorde con la legalidad internacional".

Para ello, se mostró convencido de que el nombramiento del nuevo enviado de Naciones Unidas provocará "efectos muy beneficiosos" en el objetivo de lograr una integración del Magreb.