En declaraciones a Servimedia, Aguirre, tras condenar estos ataques, señaló que "parece que ETA ha decidido presionar a las bases, la parte más débil del PSE".

El ex dirigente socialista, que tiene recurrida en los tribunales su expulsión del PSOE, manifestó que los atentados contra las sedes socialistas en el País Vasco buscan "atemorizar" a los militantes y a los ciudadanos que se pueden ver afectados por las acciones criminales de ETA.

Aguirre añadió que, en su opinión, con esta estrategia la banda etarra trata de "conseguir del PSE y del Gobierno unas cesiones en unas hipotéticas y próximas negociaciones que pudieran producirse".

Asimismo, este ex dirigente del PSE indicó que los atentados contra las sedes socialistas también dejan en evidencia la afirmación del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, en el sentido de que la banda etarra está derrotada.