Según el diario "Hoy", los ediles están acusados de haber permitido que otro miembro del Partido Socialista edificara una urbanización en suelo no urbanizable, zona en l que presuntamente también dieron autorización a la mujer del alcalde para que construyera una casa.

Los hechos ocurrieron el 15 de mayo de 1992, cuando Construcciones Barquilla solicitó al Ayuntamiento de Trujillo la licencia de obras para edificar una urbanización en la finca "Buenavista".

El aparejador municipal informó favorablemente sobre la concesión de esta licencia, que fue otorgada unánimemente por la Comisión de Gobierno el 1 de junio de ese año.