En su opinión, la decisión de morir "es una postura muy personal e individual, al margen de que la eutanasia se legisle o no. Tampoco se puede obligar a los médicos a tomar una postura comocolectivo; hay que dejar que cada profesional decida si participa individualmente en estas asistencias".

Segovia de Arana expresa su opinión personal: "La legislación puede despenalizar o dulcificar la eutanasia, pero ésta es una acción que va radicalmente en contra de la esencia misma de la profesión médica, como es salvar vidas, mitigar el dolor y consolar. Es muy difícil que este principio ético médico pueda cambiar".

Sin embargo, José María Segovia de Arana reconoce que la petición de Ramón Snpedro, tetrapléjico desde 1969 a causa de un accidente y cuyo caso de petición de eutanasia activa quedó visto para sentencia el pasado miércoles, es un caso "especial", en el que se debe respetar "la decisión personal del enfermo".

En cualquier caso, el presidente del Consejo Asesor de Sanidad insiste en que "no se puede hablar de una muerte digna, sino de terminar una vida incómoda. No creo que se dignifique la muerte porque se suicide una persona con ayuda de otra".

Respecto a la postura de ls médicos que atienden a enfermos terminales, Segovia de Arana cree que "la inmensa mayoría (él mismo se incluye entre ellos), independientemente de la regularización, no la admiten".

José María Segovia de Arana considera además que la sociedad española no está preparada todavía para asumir la legalización de la eutanasia activa, aunque señala que desde hace meses "el debate está abierto" en nuestro país.

Sobre el papel del Consejo Asesor que preside, Segovia de Arana señala que las prácticas de utanasia activa "no serán revisadas de una forma inmediata, porque el problema necesita un debate complejo y meditado".