El pleno del Parlamento vasco trató hoy una propuesta de Unidad Alevesa (UA) que pretende que las subvencions a esa larga lista de productos farmaceúticos siguiera existiendo en la sanidad pública vasca.

A las pretensiones de los foralistas alaveses, sólo se sumaron los parlamentarios del PP. En los pasillos del Parlamento autónomo, el consejero vasco de Sanidad, Iñaki Azkuna, daba cifras que sustentaban el argumento de retirar la subvención.

Azkuna señaló que durante el pasado año, la sanidad vasca se gastó 3.000 millones de pesetas en productos elaborados en torno a la vitamina C, "cuando nos encontrmos en el país de las naranjas".

Cerca de 300.000 millones fue el gasto que a las arcas públicas les supuso financiar laxantes y antiflatulentos. En calcitonina, para tratar problemas de osteoporosis, que es considerada poco práctica, las ayudas públicas supusieron en Euskadi un monto de 900 millones de pesetas.

En la sesión plenaria, el parlamentario del PSE-PSOE, Patxi López, indicó que si la medida no entraba en vigor, en 1997 el gasto en todo el Estado sería de un billón.