El objetivo del estudio, realizado sobre 15.339 entrevistados, era conocerla disposición de los europeos respecto a la actividad física, el peso y la salud, así como su grado de actividad, peso y altura.

Los consumidores encuestados conceden más importancia a la alimentación que a hacer ejercicio cuando se trata de evitar el aumento de peso. Del mismo modo, al preguntarles sobre los factores que más influyen en la salud, situaron la nutrición muy por encima de la actividad física.

Una cuarta parte de los entrevistados tenía la convicción de que hacer deporte no aporta eneficio alguno si no redunda en una pérdida de peso.

Estos resultados indican a las autoridades europeas que es necesario concienciar al consumidor sobre lo beneficioso que es para la salud llevar un estilo de vida activo y mantener el peso adecuado.

El estudio del IEEA pone de manifiesto que las tendencias respecto al ejercicio físico y la constancia con que se realiza varían de un país a otro.

Los finlandeses consideran que la actividad física tiene una influencia transcendental para la slud, mientras que los griegos la sitúan en séptimo lugar. De hecho, el 92 por ciento de los finlandeses participa en algún tipo de actividad, mientras que los griegos no superan el 60%.

Las autoridades finlandesas han llevado a cabo una campaña para la mejora de la dieta y el aumento de la actividad física, de modo que los resultados de la encuesta son alentadores para aquellos países europeos donde se desarrollan campañas similares.