Según el citado estudio, el 52,27% de las gasolineras ofrece ya a los clientes el precio de los productos en pesetas y euros, pero más de la mitad, el 56,52%, tienn mal hecha la conversión.

La mayoría de las gasolineras que han cometido este error salen beneficiadas por el mismo, lo que sucede en el 77% de los casos, frente al 23% restante, en el que el favorecido es el consumidor.

Entre los casos más significativos se encuentra el de una estación de servicio en el que la gasolina sin plomo de 95 octanos estaba a 123,9 pesetas y el precio en euros del producto era de 0,766 (127,45 pesetas).

El responsable de Relaciones Institucionales de la OCU, Juan guado, resaltó que, de momento, "no se trata de un fraude", ya que todavía se paga en pesetas, "pero habrá que ver qué pasa a partir del 1 de enero".

Aguado lamenta que casi la mitad de las estaciones de servicio no tengan incluido el precio en euros y que, además, las que lo tienen hecho hayan cometido errores. En este sentido, pidió su corrección y que, pese a que no es obligatorio, el precio en euros y pesetas se mantenga hasta mediados del próximo año.