En la presentación de su informe de gestión ante el 4 Congreso del PSE, Redondo reiteró la necesidad de que la política antiterrorista seafruto de un gran consenso de Estado que permita la continuidad de las actuaciones, incluso cuando se produzcan cambios de gobierno.

A su juicio, es la única manera de hacer comprender a ETA que "no va a conseguir nada", aunque este objetivo casi idílico es "más difícil de conseguir cuando recibes las respuestas que estamos recibiendo del PP últimamente".

Con esta referencia, Redondo ponía sobre la mesa las tiranteces que se han producido en las relaciones entre el Gobierno y el PSOE a raiz de la egativa del Ejecutivo a rubricar un documento estratégico sobre terrorismo, propuesto por los socialistas y las insistentes insinuaciones del PP sobre la posibilidad de que el PSOE reedite su pacto con el PNV.

Los socialistas están con el PP en la defensa de la Constitución y el Estatuto de Gernika y "no hay que tener miedo de esa coincidencia" porque "no hay seguidismo" de su política en otros terrenos, aseguró.

"Tenemos tono y talante distinto", dijo Redondo en su balance de gestión, "y tenemosque sacarle ventaja a eso". Recordó que tanto en la defensa de la Constitución como del Estatuto, el PP se ha sumado a lo que el PSE venía defendiendo históricamente, por lo que pidió que sean los socialista los que rentabilicen esa defensa y no se dejen "dar clases" por "la derecha" en esta materia.

Según el secretario general de los socialistas vascos, el PSE "tiene espacio" en el "escenario de radicalidad" que impera en el País Vasco y que supuestamente favorece los más directos contrincantes, PPPNV. Pero los socialistas pueden ofrecer a los ciudadanos una opción hecha desde "la razón, el sentido común y la reflexión" para hacer "una revolución de terciopelo" que impulse a los partidos a ser soluciones y no problemas.

Dedicó buena parte de sus discurso a analizar las relaciones del PSE con el PNV. Defendió como acertada la decisión de hace dos años y medio de salir del Gobierno tripartito con el PNV y EA y aseguró que "tuvimos que marcharnos" porque el Partido Nacionalista Vasco ya tenía en ente los acuerdos con HB y ETA con el único fin de "mantener el chiringuito" del poder.

Esa razón y no otra es la que, a su juicio, ha impulsado en todo momento la estrategia del PNV desde que dió por muerto el Pacto de Ajuria Enea. "Han hecho mangas y capirotes con tal de mantener el poder y no les ha importado nada", aseguró.

Sin embargo, el dirigente socialista vasco cree que buena parte de la culpa del proceso de radicalización del PNV la tiene "la debilidad del Gobierno del PP durante la pasda legislatura, porque fueron capaces de pactar con ellos todo, menos lo que tenían que pactar".

En este escenario, los socialistas deben seguir apostando por recuperar la unidad de los demócratas sobre las bases de rechazo a la violencia y aceptación de las reglas de juego democráticas y dejar claro que el único enemigo es ETA y todos los demás son adversarios políticos.

Redondo pidió la celebración de elecciones y aseguró que fue el PSE el primero que pidió comicios al Gobierno de Juan José Ibaretxe e hizo una defensa de la gestión de su Ejecutiva porque se ha revelado "acertada" con el tiempo.

Además, recordó que el PSE fue pionero en la celebración de elecciones primarias para elegir candidato electoral y destacó que "salieron bien" y fueron impulsoras del sistema en el resto del partido, "aunque en otras ocasiones no salieran tan bien".

Por todo ello, instó a los 553 delegados al 4 Congreso del PSE a sentirse "orgullosos" de los hecho hasta ahora por el partido porque todas las deciiones tomadas fueron en bien de la sociedad vascamás que del partido, en momentos "muy duros y de incertidumbre".

Tras el informe de gestión presentado por Redondo Terreros, se abrió un turno de debate y cuando éste finalice se votará. No se espera que los más críticos hacia la linea del actual secretario general den un voto de castigo a su estrategia.