Mayor Oreja presentó el libro "Diario de un Secuestro", de Alianza Editorial, que trata sobre los meses de cautiverio de Ortega Lara, y en el que se explican los entresijos de la operación que lideró el cuartel de la Guardia Civil en Intxaurrondo. También incluye un relato en primera persona del propio secuestrado que, no obstante, ha sidonovelado por los autores de la obra a partir de testimonios de personas del entorno de Ortega Lara.

A juicio del titular de Interior, ya antes de la liberación de Ortega Lara, su secuestro "fue el detonante de una nueva forma de responder frente al terrorismo; una nueva mayoría social frente a ETA comienza al día en el que se producen los acontecimientos alrededor de Ortega Lara".

"Se puede decir que desde la liberación de Ortega Lara, ETA actúa con otros objetivos y finalidades", manifestó MayorOreja. "Desde entonces, ETA está marcada por la venganza de aquel acontecimiento, tratando de hacer insoportable la política antiterrorista actuando directamente frente al partido en el Gobierno, lo que ha introducido a ETA en una nueva espiral que confirma su degeneración, ya que su móvil fue (con Blanco) y es en estos momentos la venganza ante las actuacionmes y los éxitos de la lucha antiterrorista", aseguró.

El ministró recordó el momento en que llamó a Domitila, la esposa de Ortega Lara, para comnicarle la noticia de su liberación: "De las tres conversaciones que mantuve con ella, la más emocionante fue cuando le dí la noticia de la liberación y no se lo cree, pensando que es una felicitación que hago por la liberación de Cosme Delclaux".

Para ilustrar la importancia del fenómeno social que rodeó el secuestro de Ortega Lara, Mayor explicó cómo ayer, su hija de cinco años, reconoció a Ortega Lara en la fotografía de portada del libro que hoy presentó: "Me quede sorprendido. Eso significa que calquier niña de cuatro años en España vió en la televisión en alguna ocasión a Ortega Lara y ese recuerdo tendrá siempre".

Entre las novedades que aporta el libro "Diario de un Secuestro", el autor, Antonio José Mencía, comentó cómo Ortega Lara "inició un diario durante su estancia en el zulo, que después destruyó por miedo a los secuestradores, con la idea de dejar algo para la posteridad al saber que iba a acabar su vida en el zulo".

De la situación personal del funcionario de prisiones, señalóque "le quedan tres kilos por recuperar de los que perdió. Ha aprobado las dos asignaturas de cuarto curso de Derecho que le quedaban por la UNED y, en la actualidad, está visitando todas las prisiones para agradecer a los funcionarios su respaldo".

La otra autora del libro, Belén Delgado Soto, explicó que Ortega Lara y su esposa rechazaron colaborar en la redacción del libro "porque no quisieron dar favoritismo a ningún medio de comunicación ni editorial. No querían colaborar y, como no podían oponere a ello, nos dijeron que hiciéramos lo que quisiéramos".