En su escrito de conclusiones, el fiscal Ignacio Gordillo considera probado que Jesús María Uribetxeberría Bolinaga, Javier Ugarte Villar, José Luis Erostegui Bidaguren y José Miguel Gaztelu Otxandorena son miembros de la organización terrorista ETA y fueron los encargados de ealizar el secuestro.

Estos cuatro terroristas fueron los mismos que mantuvieron secuestrado durante 532 días al funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara. Por este hecho ya fueron condenados a 128 años de prisión.

Para realizar el secuestro de Julio Iglesias Zamora, en 1987, alquilaron una nave en Mondragón (Guipúzcoa) y constituyeron la sociedad "Jalgi", formalmente con el objetivo de fabricar piezas de repuesto. Luego, siguiendo instrucciones cursadas desde Francia, en el verano de 198 excavaron en la nave un agujero de cinco metros cuadrados para esconder armas y explosivos destinados a los comandos de ETA que actuaban en esa provincia.

Más tarde recibieron órdenes directas del etarra Julián Atxurra Egurola, alias "Pototo", quien les ordenó insonorizar el agujero y prepararlo para ocultar personas secuestradas por la banda terrorista.

Dos de los procesados controlaron entonces los movimientos del empresario Angel Iglesias, pero apreciaron dificultadas en el posible secuestro e éste, por lo que eligieron a su sobrino Julio Iglesias Zamora, director de un departamento de la empresa Ikusi.

Además de los 15 años de prisión a los que se enfrentan los cuatro secuestradores de Iglesias Zamora, contra ellos se sigue un sumario aparte con la acusación de pertenencia a banda armada, por lo que se les pueden imponer penas de cárcel de hasta 12 años.

Durante el juicio de hoy, si da tiempo tras la declaración de los acusados, está citado el empresario secuestrado Julio Iglesias Zmora.