Del total de víctimas, 30 eran menores de edad, y de ellas tres no llegaron a nacer pues sus madres fueron asesinadas esando embarazadas y una resultó herida. Las 779 víctimas restantes contaban con más de 18 años. Por sexos, 60 eran mujeres y 746 varones, mientras que se desconoce el sexo de los tres bebés no nacidos.

338 víctimas no pertenecían a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado ni eran militares. De los 471 restantes, 199 eran guardias civiles, 175 policías y 97 militares.

Por provincias, la más castigada es Guipúzcoa, con 297 asesinatos, seguida de Vizcaya, con 215 víctimas mortales, mientras que lava arroja un saldo de 42 asesinatos, lo que suma un total de 554 personas a las que la banda terrorista ETA quitó la vida en la Comunidad Autónoma Vasca. En Navarra la banda terrorista ha asesinado a 37 personas.

Madrid y Barcelona se encuentran entre las provincias más castigadas del resto de España. La capital de España arroja un balance de 116 asesinatos y Barcelona 52.

Trece asesinatos fueron perpetrados en Zaragoza, siete en Sevilla, seis en Cantabria y otros cinco ocurrieron en suelo franés. Alicante, Valencia y La Rioja cuentan con tres víctimas mortales cada una de ellas, mientras que en León y Granada se han producido dos muertes en cada una.

Finalmente, Cádiz, Castellón, Ceuta, Córdoba, Murcia y Salamanca fueron escenario de un asesinato por parte de la banda terrorista ETA.

Los años más sangrientos fueron, por este orden, 1980, 1979 y 1978, con 100, 85 y 69 asesinatos, respectivamente. En 1997 se registraron 13 víctimas mortales, mientras que durante este año, hasta el día d hoy, se han producido 5 asesinatos.