Para Garzón, Reta ha informado a otros miembros de Gestoras Pro Amnistía sobre los controles policiales y evitar que fueran detenidos. Asimismo, coordina el "área de huidos" de la mencionada organización, que ahora se llama Askatasuna.

Además, Reta "confecciona y decide textos de pancartas en apoyo de presos deETA en unión de Juan María Olano", portavoz en su día de Gestoras Pro Amnistía.

Este imputado participa también en el área de Bases Democráticas de Gestoras Pro Amnistía y asiste a reunines de la denominda "Izquierda Abertzale de Ekin".

Todo esto podría ser constitutivo de un delito de integración en organización terrorista, según Garzón, quien considera que la fianza impuesta, que debe ser efectiva en un plazo de 48 horas, es acorde con la gravedad de los delitos y el riesgo de fuga.

Por ota parte, Garzón ha decidido imponer a otro presunto miembro de Gestoras Pro Amnistía la obligación de comparecer cada 15 días ante las autoridades. Se trata de Joseba Gotzon Amaro López, de quien sospecha que está "vinculado a la organización terrorista ETA-KAS-EKIN".

Además, "es el responsable de Bases Democráticas de Gestoras y uno de los responsables de Gestoras en Vizcaya, y, en tal concepto, constribuye a la finalidad de ésta y participa en la preparación del acto de homenaje al supuesto miembro e ETA José Antonio Olagorta Arana, así como respecto al de los cuatro miembros de ETA fallecidos al estallarle una bomba en Bolueta, en agosto de 2000", dice Garzón.

Garzón ya declaró la ilicitud de las actividades desarrolladas por Gestoras Pro Amnistía el pasado mes de diciembre. Entonces, argumentó que es "parte integrante de la organización terrorista ETA-KAS-EKIN".

Según Garzón, dentro de la estructura de ETA, Gestoras Pro Amnistía se encarga de la captación de militantes para la mencionada anda terrorista, de la "promoción y coordinación de actividades de 'presión social'" ejercida a través de la violencia callejera.

Para el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, Gestoras Pro Amnistía también lleva a cabo actividades de "señalamiento" de potenciales víctimas de la violencia terrorista de ETA. Además, controla y dirige el colectivo de presos de de la banda terrorista, manteniendo su cohesión interna y asumiendo su sostenimiento económico.

Ademá, "a través de algunos abogados de su bufete", Gestoras Pro Amnistía consigue "información transcendente para la seguridad y subsistencia de la estructura operativa de ETA obrante en los procedimientos judiciales en los que sus militantes se hallan incursos y en los que tales letrados se hallan personados, remitiéndola posteriormente alos responsables de la organización terrorista para que puedan adoptar las medidas pertinentes".

Según Garzón, esta agrupación organiza actos de exaltación de la violenca terrorista y de quienes la practican, además de convocar las demoninadas "jornadas de lucha', en las que se producen abundantes daños sobre bienes e instalaciones, tanto de titularidad pública como privada, y coacciones a las personas".

Este caso comenzó tras la "Operación Udazken" (Otoño), llevada a cabo el pasado 31 de octubre del año pasado en las tres provincias del País Vasco y en la Comunidad Foral de Navarra, y que se saldó con la detención de varios dirigentes de Gestoras Pro Amnistía, a quines imputa integración en organización terrorista.