En un comunicado difundido hoy, Gorka Espiau, coordinador de esta organización en Vizcaya, señaló que "si nos encontramos ante la continuidad de una política de 'premios y castigos' otorgados con criterios políticos por el Ministerio del Interior, en lugar de un verdadero ejercicio de respetoa los derechos humanos de los reclusos, estaríamos ante una adulteración de las demandas de la sociedad vasca".

A juicio de Espiau, la mayoría de los ciudadanos de Euskadi desea que se den elementos de distensión que permitan encontrar una solución el problema de la violencia, y, en este sentido, añadió que no caben "regateos, y menos con los derechos humanos".