La declaración, presentada en rueda de prensa por el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, el presidente del PNV, Josu Jon Imaz, y el portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, emplaza a no hacer a ETA "el mayor favor que puede desear: situarla en el centro del debate político".

Los tres partidos nacionalistas manifiestan "su profnda convicción en que los derechos humanos son universales e indivisibles, y por lo tanto, el respeto de derechos humanos básicos, como es el derecho a la vida, no puede ser acotado en el tiempo ni circunscrito a determinados territorios".

"No esperamos otro comunicado de ETA que no sea el anuncio del abandono definitivo de la violencia para todos y en todos los lugares", añade.