Aznar hizo estas apreciaciones en una alocución pronunciada durante el acto de presentación de la revista "La aventura de la historia", unanueva publicación de temas históricos, que dirige Daniel Solar.

El presidente del Gobierno recalcó que ETA debe tener claro que "la paz no se puede comprar porque no tiene precio", y reiteró que los españoles pueden estar convencidos de que el proceso de diálogo con la banda terrorista será transparente. "Espero que todos nos demos cuenta de la importancia del momento en que vivimos y actuemos en consecuencia", subrayó.

Por otra parte, Aznar opinó que el nacionalismo es una ideología del siglo XI que no ha sabido adecuarse a la realidad actual, a diferencia de lo que han hecho tanto las doctrinas de derecha como de izquierda, que ahora coinciden en bastantes cosas.

El jefe del Ejecutivo señaló que él no es un nacionalista español, aunque precisó que cree en la continuidad y vigencia de España. Añadió que España es una realidad con futuro y recalcó que, cuando alguien lo discute, se acuerda de la intentona golpista del 23-F, del secuestro de Miguel Angel Blanco, de la Constitución y de los espñoles que se echaron a la calle por defenderla.

A su juicio, "los españoles tenemos una historia en común, una voluntad propia, desde hace muchos años. Somos una nación plural, en la que todos somos necesarios". Agregó que, con la Constitución, la historia de España de los últimos 20 años es la "historia de un éxito".

Aznar dijo que los nacionalismos que cuestionan la identidad española proceden de una ideología del siglo XIX "que entró demasiado en el siglo XX". Añadió que los partidos, tanto deizquierdas como de derechas, han evolucionado hasta el punto de coincidir en muchas de sus ideas, mientras que los nacionalistas "se han quedado anclados en el pasado de una ideología que ya no se entiende".