Aramendi fue extraditada desde Francia por una orden de la Audiencia Nacional e ingresó en prisión el pasado 23 de enero de 197 a la espera de juicio, que tuvo lugar el pasado lunes día 2 de marzo y que quedó visto para sentencia.

Para la sala que juzga a Aramendi, "visto el estado de las deliberaciones para dictar la sentencia oportuna (...) procede decretar la libertad de dicha procesada", hecho que se comunica a la prisión en la que permanecía la supuesta etarra que, no obstante, deberá estar localizable.

Aramendi negó en la vista conocer a ninguno de los participantes en el atentado que costó la vida a Estanislao Glíndez Llano y mucho menos al etarra apellidado Arrutiazpitarte, quien citó a la anterior en su declaración ante la Policía Autónoma Vasca, relacionándola con este suceso.

Al parecer, Aramendi había conducido a los etarras desde el lugar del atentado hasta su domicilio en LLodio (Alava). Luego, en 1987, huyó a Francia, donde fue detenida en 1993 y extraditada por las autoridades galas cuatro años después.