En esta ocasión, 50 estudiantes del Colegio La Asunción de San Sebastián entregaron a los hijos de Aldaya, Oscar, Ioia y Txeto, un documento con 300 firmas de jóvenes que se solidarizan con la familia del empresario.

Una de la estudiante, Lidia Merino, explicó su asistencia como un apoyo a la familia "en estos momentos tan difíciles"para demostrar que los jóvenes violentos son una "minoría que hace mucho ruido", mientras que la mayoría de los jóvenes vascos quieren la paz. Transcurrida una hora en silencio, la concentración acabó con un fuerte aplauso.

Pacifistas de Fuenterrabía e Irún han convocado para esta tarde una manifestación que recorrerá la distancia que separa ambas localidades guipuzcoanas para reclamar también la libertad de José María Aldaya y José Antonio Ortega Lara.