La bomba estaba colocada junto a las vías en el punto situado entre el Polígono Industrial de Ali y el puente de San Martín de Vitoria. La deflagración levantó unos 15 metros de traviesas de uno de los dos sentidos de la vía por lo que quedó cortada la circulación en dicho sentido.

A pesar de ello, el táfico ferroviario continuaba circulando con normalidad por la via que no estaba dañada, según se indicó desde el Gobierno Civil.

Después de la explosión, miembros de los equipos de desactivación de explosivos de la Guardia Civil y Policía Nacional registraronn las vías en previsión de nuevos atentados contra las lineas ferreas amenazadas por ETA a pesar de haber sobrepasado en 16 horas el plazo dado por la organización terrorista.

Hace una semana, un comunicante anónimo que dijo hablar en nombre e ETA, anunció al diario "Egin" la colocación de diversos artefactos en la linea ferrea Irún-Madrid-Algeciras. Según sus indicaciones, las bombas podrían estallar a partir de las 20 horas del pasado martes hasta las 22 horas de ayer.

Efectivos de la Guardia Civil inspeccionaron diversos tramos de la línea amenazada sin encontrar ningún artefacto.