Durante su participación en unas jornadas organizadas por "The Economist", el titular de Hacienda destacó que la reducción de la deuda pública, que pasará de 68,1% en 1996 a 48,8%en 2004, permite al Estado disminuir el importe de los presupuestos destinado a gastos financieros en un 2,2% del PIB, lo que supone un ahorro de 17.305 euros.

Montoro destacó que esto es posible gracias a la política de estabilidad presupuestaria del Gobierno que, además, ha provocado un fuerte impulso a la creación de empleo.

"España ha alcanzado la cifra de 16.800.000 ocupados, y este nuevo empleo es de buena calidad", señaló el ministro refiriéndose a la temporalidad en el empleo y destacandoque el 79% del empleo creado desde 1996 es indefinido ya que, de los 4,39 nuevos asalariados en España, 3,43 millones tienen contrato indefinido.

Montoro reiteró los beneficios para la economía española de las rebajas de impuestos y anunció que se mantendrán en el futuro en parámetros similares a los ya aplicadas.