Aguiriano restó validez a las aseveraciones realizadas por algunos políticos vascos (entre ellos el presidente del PNV, Xabier Arzalluz), en el sentido de que el País Vasco está discriminado en la inversiones públicas.

A su juicio, esas apreciaciones contienen "impertinencias" e "incogruencias" que no tienen nada que ver con la realidad. "Yo creo", añadió, "que la radiografía económic de Euskadi, muestra una patología lo suficientemente preocupante como para que todos dediquemos el máximo de nuestros esfuerzos a corregir esta patología sin desviarnos en plantear cuestiones que incluso pueden ser nocivas para nuestra recuperación".

Según Aguiriano, se ha tratado de crear la errónea percepción de que el Estado abandona a los vascos, cuando lo cierto es que el gasto público per capita es sensiblmente mayor en Euskadi que en otras autonomías.

Adujo a este respecto que el gasto cosolidado del Gobierno vasco, de las diputaciones y de los ayuntamientos es de 470.000 pesetas al año por habitante en el País Vasco, frente a 364.000 en Navarra, 288.000 en Cataluña o 361.000 en la Comunidad de Valencia.