A pesar de que el Ayuntamiento ha decidido trasladar la unidad permanente que tenía en Mercamadrid a los Servicios Centrales de Consumo, los inspectores seguirán realizando los controles sanitarios esporádicamente y de forma sorpresiva, y siempre que la dirección de la empresa o el Ayuntamiento lo consideren oporturno

Rojas explicó que el consistorio decidió la retirada de esa unidad permanente, formada por 7 inspectores, para "economizar recursos" ante el ajuste presupuestario municipal del próximo año.

Indicó que el control de la actividad comercial la realizaban los inspectores municipales, los inspectores de Mercamadrid y los veterinarios, "por lo que estaba triplicada", añadió.

"Hemos creido oportuno retirar esa unidad de inspectores de consumo porque hay dos planteles de funcionarios, los inspectors de Mercamadrid y los profesores veterinarios que están adscritos a esa empresa", afirmó Rojas.

A su juicio, esta medida debería ser aplaudida por todos los contribuyentes, porque significa que el Ayuntamiento no va a contratar a más funcionarios para cubrir las necesidades demandadas desde otros lugares, como las campañas de control de Navidad o de rebajas.

CONSUMIDORES DESPROTEGIDOS

Por su parte, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) criticó hoy la decisión municipal de retirar launidad de inspectores de Mercamadrid, que significará que los "consumidores madrileños queden aún más desprotegidos".

En una nota difundida hoy, la OCU considera "muy grave" que no sean los inspectores municipales los que controlen la calidad e higiene de los productoros frescos porque, a su juicio, si la inspección la realizan los veterinarios de Mercamadrid, "las garantías de objetividad quedan en entredicho".

Sin embargo, Rojas indicó que con estas afirmaciones la OCU demuestra la ignorancia qe tiene sobre el funcionamiento de los servicios municipales, puesto que Mercamadrid es una empresa municipalizada y sus veterinarios no son empleados de la empresa sino funcionarios municipales, retribuídos por el Ayuntamiento.

Otro de los temores expresados hoy por la OCU es el posible aumento de problemas sanitarios, que ya denunciaron, si la inspección es menor.

El director de los Servicios de Consumo aseguró que hasta el mes de octubre, los 7 inspectores municipales permanentes de Mercamadri sólo levantaron 110 actas, que suponen 1,5 acta por funcionario.

En su opinión, este hecho ratifica que la situación sanitaria en el principal mercado abastecedor de Madrid está perfectamente controlada, lo que también se demuestra en el número de reclamaciones recibidas en la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC), donde las denuncias sobre el sector de alimentación supusieron un 1,5 del total de reclamaciones.