Beatriz Lasa, esposa de Santamaría, negó reiteradamente que su marido tuviera conexión alguna con el mundo del narcotráfico y acusó a los medos de comunicación y a algunas instancias jurídicas que, propalando "con maldad la infamia y la calumnia" a los primeros, y permaneciendo "pasivas ante la mentira", a los segundos; "fue así como se seleccionó el blanco sobre quien disparó el asesino".

Asimismo, acusó al diario Egin de ser "amparador, cobijador y pantalla de los asesinos" y de erigirse "en principal portavoz de tales prácticas infames".

Refiriéndose a Herri Batasuna, tras el comuncado emitido ayer en el que continuaban acusando a antamaría de narcotráfico, manifestó que el asesino y "sus socios pretenden asesinar a José Antonio por segunda vez, ahora con insidia. Buscan amparar el horror cometido, bajo pretexto de odiosas acusaciones de narcotráfico, falsas hasta el infinito".

Asimismo, afirmó que tiene la esperanza "de que se persiga hasta donde sea necesario a su asesino y a quienes han hecho causa común para cometer el crimen: hasta expulsarlos y repudiarlos por nuestra sociedad".

Beatriz Lasa, que estuvo acompañada ensu comparecencia ante los medios de comunicación por sus tres hijos y por la hermana del fallecido, reiteró que "no ha existido jamás, no existe, procedimiento ni menos aún acusación judicial alguna contra mi marido por asunto alguno relacionado con el narcotráfico", poniendo por testigos a la Audiencia de San Sebastián, fiscales y jueces.

Santamaría declaró, hace unos meses, ante la Audiencia Provincial de San Sebastián por un presunto cohecho a varios Guardias Civiles en un asunto relacionado con eltráfico de tabaco.