Según el acuerdo entre de los Estados miembros de la Unión Europea (U), el requerimiento de convalidar este documento según el país de residencia, suponía "un obstáculo a la libre circulación de personas".

Los 'quince' consideran inadmisible dicho impedimento formal, "teniendo en cuenta los progresos realizados en el marco de la integración europea".

De hecho, la decisión de los socios comunitarios se ha visto avalada antes de su entrada en vigor por una sentencia del Tribunal de Justicia de Luxemburgo, en la que se libera de posibles sanciones a los conductores eropeos que residan en otro país de la UE y no hayan convalidado su permiso de conducir.

El argumento de la sentencia se centra en que no se puede equiparar, desde el punto de vista sancionador, a una persona que no ha hecho el trámite de cambiar su carnet, con quienes carecen del permiso de conducir.

Por su parte, el Parlamento Europeo ha recibido ya una propuesta para reformar la directiva comunitaria sobre permisos de conducción, permitiendo que convivan el actual modelo de cartulina con otro qe tiene formato de tarjeta de crédito y sería válido para toda la UE.

La tarjeta debe ceñirse a unos estándares internacionales y en sus dos caras figurarán varias informaciones relativas al titular, unas con caracter obligatorio y otras no.

En cualquier caso, el sistema propuesto introduce mecanismos de seguridad que dificultan la falsificación y simplifica la emisión de permisos en todo el territorio europeo. Además, facilita la gestión del pretendido sistema de carnet por puntos en toda la unin Europea, como elemento que elevaría la seguridad vial de manera armonizada.