Martínez Millán explicó que la principal dificultad para que los agentes españoles consigan el mismo precio es la concentración de las vacaciones en España. "Mientras que los tour-operadores extranjeros te garantizan la ocupación de mayo a octubre, las fechas solicitadas por losespañoles se limitan a 45 días", indicó.

Esto hace que el mercado nacional sea considerado "secundario" por los hoteleros españoles, de forma que lo penalizan con precios entre un 10 y un 15% superiores, según Martínez Millán, incrementos que pueden llegar hasta el 50% en el caso de los apartamentos.

El presidente de la patronal de agencias indicó que, no obstante, debido precisamente a su mayores precios, el mercado turístico nacional ha sufrido incrementos de precios menores que el extranjero. racias a la mayor demanda, los hoteleros han conseguido que los visitantes de fuera de nuestras fronteras paguen un 10% más de media, mientras que para los residentes en España los precios han subido en torno a la inflación.

Martínez Millán pidió, para solucionar este problema, que se amplíe el período vacacional en España, como ocurre en otros países europeos, para que pueda repartirse la demanda de destinos en más meses, con lo que se evitarían además las masificaciones y el parón del mes de agostonivel económico general.

En cuanto a la situación actual del turismo, Martínez Millán se mostró convencido de que podrá repetirse la ocupación del año pasado y aumentar un 10% los ingresos, con lo que se alcanzarán más de 3,2 billones de pesetas. Dijo que "está flaqueando" un poco el mercado inglés y sueco, pero podrá compensarse por el resto de países.

En cuantos a los españoles, detectó "cierto retraso" en la formalización de sus reservas, fenómeno que afectó especialmente en mayo y junio, per indicó que parece que el mercado nacional se está recuperando sobre todo en la larga distancia, mientras que en la media "la demanda es algo errática".