En el caso de España, el 72% del total de tiempo de trabajo perdido se debe a ausencias cortas y frecuentes (inferiores a 7 días) y el 28% a bajas de larga duración (superiores a 7 días). Las principales causas de estos periodos de ausencia de larga duración se deben a dolores músculo-esqueléticos y a patologías relacionadas con el estrés y la salud mental.

Las empresas españolas ofrecen beneficios a sus trabajadores relacionados con la salud, siendo el más común el complemento de ingresos en caso de enfermedad o discapacidad de larga duración, que utilizan el 56% de las compañías estudiadas.

También son habituales la paga por enfermedad, ofrecida por el 48% de las empresas, y la cobertura dental, con el 44% de las compañías.

Asimismo, las empresas proporcionan beneficios para mejorar su salud y su productividad, como el chequeo médico (79% de las compañías), el pago de la cuota de un gimnasio (17%), programas de asistencia al empleado (9%), programas para dejar de fumar (33%) o asesoramiento sobre la dieta (9%). Por su parte, en España el 76% de las compañías ofrecen seguro médico privado a algún colectivo de empleados.

Por su parte, los costes derivados de los beneficios de salud aumentaron en España un 6,6% en 2007, aunque las empresas prevén mantener este tipo de ayudas debido al papel que éstos juegan en la atracción y retención del talento.

De acuerdo con el estudio de Mercer, las empresas europeas están gastando una media del 5,3% del coste total de la nómina de la plantilla en beneficios de salud, aunque en España ese porcentaje es algo inferior y se sitúa en el 4,2%.