Así lo concluye el estudio "Conductas antisociales y delictivas de los jóvenes en España", elaborado por el Centro de Investigación en Criminología de la Universidad de Castilla-La Mancha para el CGPJ.

Dañar algo a propósito, participar en peleas, robar en las tiendas o grandes almacenes y consumir cerveza, vino y calimocho son algunos de los actos antisociales y delictivos que realizan a esa temprana edad.

Las conductas problemáticas más comunes entre los 12 y los 17 años son bajar música por Internet (66%), consumir cerveza y vino (63%), emborracharse (41%), consumir "porros" (28%) y participar en peleas (22%).

Por otra parte, se destaca que ser emigrante o hijo de emigrante en España no incrementa el riesgo de adoptar conductas antisociales o delictivas.

Según informó hoy el CGPJ, el estudio sigue una metodología criminológica, testada en Estados Unidos y Europa, que permite conocer de forma aproximada los delitos cometidos por adolescentes y jóvenes y que nunca han sido denunciados.

Se trata de lo que los expertos denominan como "cifra negra" de la delincuencia juvenil que, según el CGPJ, puede alcanzar el 90% del total de delitos cometidos.

Las conclusiones del estudio son esclarecedoras: las conductas antisociales y delictivas aumentan con la edad y alcanzan su nivel máximo a los 17 años; las chicas tienen un patrón de conducta similar al de los chicos; estas conductas son más frecuentes cuando se tienen amigos que ya las han adoptado. Otro factor que incrementa el riesgo es vivir en un medio urbano.

El estudio se ha elaborado a partir de una encuesta realizada a 4.152 menores escolarizados (el 49,2%, chicos y el 50,7%, chicas), en edades comprendidas entre los 12 y los 17 años, en centros de todo el país tanto públicos como privados y concertados.