El informe, realizado con datos actualizados, muestra que España rebasaba los topes establecidos para inflación, tipos de interés, déficit público y deuda pública. En la misma situación que España se encontraban Grecia, Italia, Portugal y Suecia.

Así, eran los países mediterráneos, junto con Suecia, los que estaban muy lejos de alcanzarlos requisitos de Maastrich y de la evolución que mantienen el resto de los países de la UE.

Luxemburgo y Alemania cumplían todos los requisitos. Dinamarca e Irlanda incumplían sólo el criterio de deuda pública, y Francia el de déficit público. Bélgica, Holanda, Austriay Finlandia encuentran problemas para ajustar dos requisitos: el déficit y la deuda. Reino Unido cumplía en deuda pública, aunque se mantenía a escasas décimas de hacerlo en el resto de los indicadores.

España encuentra también su ayor problema en el déficit público, que supone el 6% del PIB, frente al 3% exigido por Maastrich. La deuda pública (65,3%) es cinco puntos superior al requisito para acceder a la Unión Europea. Además, España mantenía un 4,3% de inflación, frente al 2,6% de los tres paises con mayor estabilidad de precios, y tenía unos tipos de interés del 11 por cien, punto y medio por encima del tope máximo por esas fechas.

El informe destaca que cuatro países (Grecia, Italia, Reino Unido y Suecia) tienen fuera su ivisa del Sistema Monetario Europeo.

TAMPOCO EN EL 96

Asimismo, España tampoco cumplirá en 1996, a escasos meses de pasar el primer examen de convergencia, ninguno de los requisitos para entrar en la primera fase de la Unión monetaria, según las previsiones que maneja la Secretaría Técnica de Comercio.

La inflación se situará en el 3,7%, a dos décimas del límite exigido, y el déficit público se reducirá hasta el 4,4% del PIB, a 1,4 puntos del requisito establecido para entrar en la Unión Europe.

Además, la deuda pública aumentará hasta el 67,4%, lejos del 60% establecido por Maastrich y los tipos continuarán en el 11%, a más de dos décimas de las exigencias de convergencia.

Para 1996, Alemania y Luxemburgo cumplirán los cuatro indicadores, y el resto de los países se encontrara con los mismos problemas que en agosto de 1995. Los países mediterráneos volverían a incumplir los cuatro requisitos, mientras que Suecia saldría del grupo de cola al cumplir en inflación.