Así lo afirmó hoy la Sección Española de Amnistía Internacional (AI) en su informe anual de 2009 "El estado de los derechos humanos en el mundo".

La presidenta de la Sección Española de AI, Itziar Ruiz- Giménez, lamentó que España exportara armas el año pasado a "países donde se cometen graves violaciones de derechos humanos y con conflictos armados donde la población civil está atrapada".

En este sentido, deploró que España fuera el octavo mayor exportador de armas y que entre los países receptores se encontraran Israel, Colombia, Marruecos y Pakistán, donde la población civil se encuentra "en una grave situación".

Por otro lado, AI destaca que el 50% de los países del mundo registraron casos de torturas y malos tratos a manos de funcionarios, entre ellos España.

Ruiz-Giménez criticó "esa práctica frecuente de malos tratos y torturas de agentes del Estado en España" y reclamó como "necesidad imperiosa que se lleve a cabo una investigación exhaustiva e independiente que ponga fin a la impunidad".

ATENTADOS DE ETA

Por otro lado, Ruiz-Giménez recordó que ETA mató a cuatro personas y cometió varios atentados con bombas, en "una campaña de hostigamiento contra representantes de partidos políticos y otros colectivos en el País Vasco".

Además, indicó que España no respetó el principio de no devolución de personas a sus países de origen en el caso de que corran riesgo de ser sometidos a malos tratos. Este supuesto ocurrió con el sirio Basel Ghalyoun y con el ruso Murad Gasayev.

La presidenta de AI en España comentó que España "sigue en la cola en la lucha contra el racismo", al registrar ataques de índole racista y ser uno de los cinco países de la UE que no publica datos oficiales sobre denuncias y procedimientos penales relacionados con delitos de esta índole.

En materia de inmigración, Ruiz-Giménez mostró su "enorme preocupación" por el posible recorte que puede producirse en materia de asilo y extranjería con reformas legislativas aún en trámite parlamentario. "Los derechos humanos de los inmigrantes no admiten rebajas, no están de oferta en una situación de crisis económica como la actual", añadió.

Por lo que respecta a la violencia machista, recordó que el año pasado hubo 70 mujeres muertas a mano de sus parejas o ex parejas, 34 de ellas inmigrantes.

Ruiz-Giménez afirmó que existen "obstáculos administrativos" para las mujeres inmigrantes maltratadas y criticó que el Ministerio del Interior autorice que en estos casos se aplique el protocolo para víctimas de género y el procedimiento de expulsión, lo que "hace que muchas mujeres inmigrantes tengan miedo de acudir a una comisaría".

Como aspectos positivos, AI da la bienvenida a algunos avances en el régimen de incomunicación a detenidos, como la grabación de los interrogatorios, y a la aprobación de un plan nacional en materia de derechos humanos.