Esa aportación de España a cooperación al desarrollo supone un incremento de 0,05 puntos respecto a 2004, cuando destinó a este fin un total de 2.437 millones de dólares, el 0,24% del PIB.

Los países miembros de la OCDE destinaron el pasado año a ayuda al desarrollo un total de 106.500 millones de dólares, lo que representa una media del 0,33% del PIB de los estados ricos.

Por tanto, el informe sitúa a España por debajo de la media de los países de la OCDE en cooperación al desarrollo. También están por debajo de la citada media Estados Unidos (0,22%), Japón (0,28%), Australia (0,25%), Grecia (0,24%), Italia (0,29%), Portugal (0,21%) y Nueva Zelanda (0,27%).

Los países ricos que dedican más porcentaje de su PIB a ayuda al desarrollo son Noruega (0,93%), Luxemburgo (0,87%), Holanda (0,82%), Dinamarca (0,81%), Bélgica (0,53%), Austria (0,52%), Gran Bretaña (0,48%), Finlandia y Francia (0,47%), Suiza (0,44%), Irlanda (041%), Alemania (0,35%) y Canadá (0,43%).