Ciencia

España deposita más de 1.000 semillas en el ‘Arca de Noé vegetal’ del Ártico

MADRID
SERVIMEDIA

Una delegación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha viajado a la remota isla de Svalbard, en el Ártico, donde este jueves entregó una selección de más de 1.000 variedades vegetales de la colección nacional española que serán depositadas en el Banco Mundial de Semillas de Svalbard (Noruega), la avanzada infraestructura científica que atesora la mayor colección de seguridad de la biodiversidad agrícola global y que salvaguarda la base de la alimentación mundial.

Al acto de entrega asistieron la vicepresidenta de Relaciones Internacionales del CSIC, Ángeles Gómez Borrego, y el investigador Luis Guasch, del Centro de Recursos Fitogenéticos del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA-CSIC), quien depositó las variedades vegetales.

Es la primera vez que esta instalación incorpora variedades procedentes de España, país de gran riqueza en biodiversidad al ser puente entre Europa, Iberoamérica y África.

El Banco de Semillas de Svalbard, una especie de ‘Arca de Noé vegetal’, es una infraestructura científica mundial conocida como ‘bóveda del fin del mundo’ que se encuentra en una isla del archipiélago ártico de Svalbard. Guarda más de un millón de muestras de semillas de diferentes cultivos de casi todos los países del mundo y es la mayor colección de biodiversidad agrícola.

“Este material, también conocido como recursos fitogenéticos, constituye la base de casi toda nuestra alimentación”, explica Guasch, quien añade que se han depositado 1.080 variedades españolas. “De ellas: 300 son cereales de invierno, 114 de las cuales corresponden a trigos; 510 son leguminosas, de las que 189 son judías; 200 son hortícolas, 81 de ellas tomates, y 108 variedades de maíces”. El periodo de duración del depósito suele ser de 10 años renovables.

89 DEPOSITARIOS

El plan de depósito de las muestras de la colección base del CRF se inició hace más de seis años siguiendo unos minuciosos protocolos de trabajo. Esto se debe a que, para que las muestras sean recientes y se conserven viables durante el mayor tiempo posible, quizá cientos de años, se requiere su multiplicación en el campo en las condiciones adecuadas, sin cruces ni mezclas con otras variedades y manteniendo la identidad de las variedades.

El proyecto está auspiciado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la organización internacional Global Crop Diversity Trust (CROP Trust), la Fundación Bill y Melinda Gates y el Gobierno de Noruega, que ha hecho de la instalación un compromiso con la conservación de los recursos fitogenéticos con vistas a poder hacer frente, en caso de necesidad, a los desafíos planteados por el cambio climático y otras posibles amenazas globales.

Alrededor de 89 depositarios ya han enviado sus muestras a Svalbard. Entre ellos se encuentran los centros internacionales de conservación vinculados a la FAO, los grandes países y la gran mayoría de Estados europeos.

(SERVIMEDIA)
09 Jun 2022
MGR/nbc