Con todo, según destaca la Organización Interprofesional del Huevo y sus Productos (Inprovo) en un comunicado, España sigue siendo uno de los primeros productores de huevos de la UE, con un 13% del volumen total.

Sin embargo, el descenso de producción acumulado en los últimos cuatro años (periodo 2005-2008) alcanza el 20,3%.

Por otro lado, Improvo explica que el sector español se enfrenta en los próximos meses a decisiones de gran trascendencia ya que a medida que se aproxima el año 2012, plazo para la reestructuración de las granjas que tienen que adaptarse a la directiva europea, se van viendo con más claridad las dificultades de este proceso.

Primeramente, el sector necesita de una enorme capacidad de financiación (600 millones de euros es la inversión estimada), y además, de todas las ayudas públicas disponibles para que las granjas españolas puedan continuar produciendo los huevos que se consumen en España.

Por ello, pide a las administraciones públicas y las entidades financieras que apuesten por el futuro de los profesionales y empresas del sector, que sin duda se enfrentan a un proceso de cambios sin precedentes.