Así lo adelantó Escrivá durante la presentación en rueda de prensa de los datos de afiliación de la primera mitad del mes de junio, destacando que este mes será el “mejor” junio a excepción de 2005 y de la “volatilidad” de los años de pandemia.

El ministro puso en valor que este miércoles se superaron por vez primera los 20,4 millones de afiliados a la Seguridad Social y que hay un aumento de ocupados de más de un millón con respecto a las cifras anteriores a la pandemia. Además, destacó que, en el conjunto del primer semestre, se producirá un aumento de 300.000 afiliados en términos desestacionalizados y de 550.000 ocupados medios.

Asimismo, subrayó que el aumento de la afiliación es generalizado y superior a lo habitual para este mes en todos los sectores, especialmente en los de mayor valor añadido, como informática, telecomunicaciones y actividades científico-técnicas.

En cuanto a la hostelería, el ministro apuntó que todavía se encuentra más de un 1% por debajo de las cifras de empleo anteriores a la pandemia, por lo que este sector todavía no se ha recuperado plenamente. Igualmente, indicó que el crecimiento del empleo se está dando en todas las comunidades autónomas.

INDEFINIDOS

Por otra parte, Escrivá subrayó que ya hay 1,4 millones de empleos indefinidos más de lo que hubiera sido “habitual” antes de la entrada en vigor de la reforma laboral. De ellos, unos 400.000 son fijos discontinuos. En cuanto a la duración de los contratos, ha pasado de 15 a 18,6 días, un 22% más.

Respecto de las cuentas de la Seguridad Social, Escrivá remarcó que hasta mayo han subido los ingresos un 8%, mientras que los gastos se elevan en torno al 6%, de modo que “mes tras mes” se avanza en la “reducción del déficit”.

Por otra parte, el ministro informó de que las personas en ERTE están “estabilizadas” ligeramente por encima de las 20.000, sin que se esté observando “nada significativo” ante la situación actual de la economía.

Finalmente, en cuanto a los empleados ucranianos, el ministro explicó que ya trabajan en España más de 7.000 y que el 67% de los contratos que las empresas formalizan con ellos son indefinidos.

Además, señaló que mayoritariamente trabajan en sectores de “menos cualificación” ya que, aunque han venido principalmente mujeres y con alta formación, tienen que aprender el idioma y homologar los títulos.