Carbonero, que hoy asistió en Madrid a una reunión en el Ministerio de Vivienda, afirmó a los periodistas que "hemos de esforzarnos todos para ofrecer una perspectiva de unidad y de trabajo conjunto a la hora de resolver los problemas de los ciudadanos".

El conseller valoraba de este modo la crisis abierta en el gobierno de coalición tras la imputación del hasta ahora portavoz de Unió Mallorquina Bartomeu Vicens por un presunto caso de corrupción.

Reiteró que lo que debe hacer el diputado autonómico es renunciar a su escaño, como ya le ha pedido el presidente socialista, Francesc Antich, y descartó por entero que deban convocarse elecciones anticipadas.

Sin embargo, en caso de no producirse esa renuncia, los socialistas quedarían en minoría en el Parlament, lo que dificultaría la gobernabilidad futura.

"El momento no puede ser peor. No es bueno. Estamos en una situación económica difícil", subrayó Carbonero al ser preguntado por la posibilidad de anticipar los comicios, y añadió que "hemos de esforzarnos todos para ofrecer una perspectiva de unidad y de trabajo conjunto a la hora de resolver los problemas de los ciudadanos".

A su juicio, "eso es lo que entienden los ciudadanos y no peleas partidistas en forma de una convocatoria de elecciones anticipadas, y desde mi punto de vista está claro que lo mejor es que haya estabilidad presupuestaria y que permita al Govern seguir trabajando".

Concluyó Carbonero señalando que "estamos a la espera de que Unó Mallorquina haga lo que tiene que hacer". Vicens, mientras tanto, mantiene su idea de seguir en el Parlament, pasando al Grupo Mixto, hasta que se resuelva el proceso judicial abierto contra él.