Los diecinueve pacientes, todos mayores de 65 años, fueron operados en el hospital Bupa Gatwick Park en febrero. Después de la intervención, la mayoría denunciaron sufrir visión borrosa. Al parecer, la causa fue la confusión entre dos tipos de solución utilizadas en las operaciones de cataratas: una de celulosa metil, que se administra externamente y contiene conservantes, y otra que se inyecta.

Las autoridaes sanitarias creen que se les inyectó la primera solución, la cual daña la córnea. Por culpa de este error, los pacientes experimentan visión borrosa y en un futuro podrían necesitar injertos de córnea.

Un experto consultado por la BBC denunció que este tipo de error ya se ha producido en otros hospitales, citando el ejemplo de uno hace cinco años en Londres que provocó la pérdida de visión a cinco personas.