Ercros achaca esta reducción, por una parte, a que los resultados del pasado ejercicio fueron los mejores de su istoria, y por otra, a la debilidad en que se encuentra el negocio de la química básica, afectada por los bajos precios de los productos finales.

Destaca el caso de la sosa cáustica, que durante el pasado ejercicio experimentó un incremento en su precio medio del 98%, mientras que hasta junio cayó un 30%. Asimismo, también influyó el cese de producción en la fábrica de Cartagena, que tuvo lugar en diciembre de 2001.

La cifra de negocio ascendió a 121,3 millones de euros, lo que supone una disminuión del 15,6% respecto a los seis primeros meses del pasado ejercicio.

No obstante, la compañía asegura que los resultados alcanzados están dentro de sus previsiones, que pronosticaban debilidad para esta primera parte del ejercicio y un cambio de tendencia para el segundo semestre, que, si se materializa, "hará posible concluir el ejercicio con un resultado en el entorno de los 6 millones de euros".